ENTENDER LA MEDITACIÓN – 3ª Entrega

Dando continuidad a la segunda entrega y transitando un desarrollo de transición hacia un estado de comprensión de lo que es “Meditación”, podemos asegurar que: Tener conocimiento del “Campo Energético Humano” nos permite un paso más hacia la amplitud de consciencia y una visión que nos acerca a una realidad más completa de la que muchos podían tener hasta el momento. Utilizando las técnicas meditativas iremos poco a poco escalando en niveles de consciencia de frecuencias vibratorias superiores al estado físico de nuestro plano, sintonizando con campos sutiles que nos abren los canales de interconexión con la energía vital, latente en el “Campo Energético Universal”. Saber que somos más de lo que vemos y que está en nosotros posibilitar la apertura a un conocimiento milenario que otras culturas ya aceptaban como parte natural de la existencia, nos hace crecer un peldaño más en la comprensión de la “Verdad”. Estar en armonía en cuerpo, mente y espíritu en una forma de expresión global o si queremos profundizar podemos decir, en los siete planos sutiles del aura, referenciados por los siete chakras principales, nos predispone a la canalización de la energía vital ya sea para reactivar nuestros planos y generar salud, bienestar y plenitud o aportar la propia energía a quienes más la necesiten.
La vida es una fuente inagotable de acontecimientos….. Pero ahora me hago una pregunta, mejor

ENTENDER LA MEDITACIÓN - Segunda Entrega

Avanzando en la comprensión de los valores de conformación del ser humano, sin ninguna duda llegaremos a un simbólico final que nos mostraría un todo que podemos denominar  “campo energético humano” y con ello entenderíamos al “Ser Total”. Ese campo está constituido por el cuerpo sutil o aura que rodea al cuerpo físico. Según los especialistas en la observación del mismo, como  la sanadora y científica Bárbara Ann Brennan, se pueden apreciar siete capas que se distinguen una de la otra con características específicas que inciden en las dinámicas psicofísicas del ser humano con repercusión en el mantenimiento del equilibrio o no del funcionamiento orgánico. La interpretación que se haga de la observación de cada capa puede facilitar la comprensión del origen de algunas de las dolencias que circunstancialmente o de manera crónica afecten el nivel de salud de una persona. El aura conjuntamente con el cuerpo físico es a lo que se ha expresado anteriormente el “Ser Total”. En los niveles primarios de observación del aura se la puede distinguir como una emanación luminosa que rodea el ser humano. Se necesita una conciencia cada vez más expandida para poder distinguir cada una de las capas, que también se denominan cuerpos sutiles, lo que nos da a suponer que se debe poseer una preparación profunda y determinadas condiciones para lograrlo. Volviendo a las características de cada capa, en la observación del aura se pueden distinguir capas estructuradas que alternan con capas no estructuradas. Esto quiere decir que hay capas con forma definida y otras similares a fluidos en movimiento que toman la forma de las estructuradas. Así las capas 1; 3; 5 y 7 son las de forma definida; mientras que las 2; 4 y 6 se definen por la forma de las anteriores. 

Para comenzar esta etapa de discernimiento, tendríamos que referirnos a determinados centros

Entender la Meditación - Primera Entrega

Para dar entendimiento sobre la “Meditación” refirámonos primero al Ser Humano.  Se debe comprender qué es; como se conforma. Podemos asegurar que se trata de la más maravillosa manifestación de vida del universo conocido.  Si bien hay pautas que caracterizan la especie y que son comunes a todos, cada individuo es una obra única e irrepetible. Todos poseemos un cuerpo, una mente y experimentamos emociones, afectos y sentimientos. Los tres grandes parámetros: cuerpo, mente y espíritu pero con grandes matices que particularizan a cada persona haciéndola diferente de cada uno de sus semejantes. Estas tres cualidades, que contienen en sí mismas otras más, son muy dinámicas y se relacionan una con la otra como bien sabemos; y para que interactúen equilibradamente, en estos tiempos que corren, es una tarea compleja. Para mantener el estado de salud estos tres parámetros que denominaremos universos (universos del ser humano) deben funcionar en armonía. Si alguno de ellos se sobrecarga de actividad, por decirlo de alguna manera, incide sobre la armonía del todo que conforman los tres universos. Los estamos desglosando pero